martes, 6 de noviembre de 2007

La valentía de la mujer mexicana.

A lo largo de la historia de nuestro país han existido mujeres de innegable valentía y que han trascendido por sus grandes logros, tales como Frida Khalo, Doña Josefa Ortiz, la misma Malitzin (Malinche), María Félix y ¿Por qué no? Hasta Salma Hayek. Sin embargo hemos perdido la capacidad de admirar y apreciar los actos cotidianos de extrema valentía y fuerza de nuestras mujeres mexicanas.

Para muestra un botón:

Trata de conducir un automóvil sujetando el volante con los codos y sostener en una mano un espejo y con la otra el rimel, y lo que es mas impresionante: ¡Pintarse las pestañas con un ojo en el camino y el otro en el espejo! ¿No es esto un acto de extrema valentía?
¿O que tal atravesar una transitada avenida sin voltear a los lados, confiando en la capacidad y en los reflejos de los que vienen circulando en esa vía? ¿No es digno de admirarse?
¿Y frenarse de repente y dar vuelta sin previo aviso (direccionales), confiando en que el conductor que viene atrás de ellas tiene una tremenda intuición y un poderoso don de adivinación?
¿Y soportar las risas y miradas burlonas al estacionarse en cordón en una zona para hacerlo en batería? ¡Esto es valor!
¿O no se necesita tener gran fuerza para soportar los claxonazos de las dos filas de vehículos que no dejan pasar al ir montadas en la línea divisoria de los carriles a 20 km/hr?

Piénsalo….

Y aprende a apreciar estos valientes actos. Cada vez que te pase alguna de las situaciones acá descritas, en vez de reaccionar con una mala palabra o un golpe al volante trae a tu mente estas líneas y admira a esa mujer y regocíjate de haber podido presenciar una demostración de su valentía y fuerza.

2 comentarios:

catalina halles dijo...

jjajja, menos mal que no se manejar, asumo que en tu repertorio deben haber algunas tantas aplicaciones del el concepto para mujeres transeuntes..jajaj

Pitufo dijo...

Hola Catalina, jejeje pues por el momento no tengo algo referente a las transeúntes, escribí esto por experiencias propias así que espero no haber ofendido a nadie. Agradezco tu visita y ojalá regreses pronto. Saludos.